Me envía mi amigo Marcos Pérez, un mail, en el que nos invita a reflexionar, a raíz de la noticia de la ‘Campaña de marketing social‘ llevada a cabo por el Ayuntamiento madrileño de Fuenlabrada (España).
El caso es que el Ayuntamiento de esta localidad desarrolla un programa denominado «Acción positiva para la igualdad de oportunidades«, para favorecer el ingreso de mujeres en la Polícía Local. Además, ahora han puesto en marcha otra campaña, esta vez relacionada con la seguridad vial, y para ello han ideado la campaña «Igualdad también en Seguridad Vial», que consiste en la introducción de figuras femeninas en toda la señalética de tráfico del municipio. Según la concejala de Seguridad Ciudadana y Tráfico, en el plazo de un año, el 50 por ciento de las señales de tráfico de esta ciudad serán femeninas. y de esta forma se acabará con el sexismo que hasta ahora se daba tambien en las señales de tráfico.
En temas de política la verdad es que nunca se sabe por dónde te van a salir los representantes públicos. Como idea, concepto y realidad, la igualdad debe hacerse efectiva pero en mi opinión esto no es más que marketing político en busca de la noticia.
Os dejo la reflexión que me envían:
¿Por qué un símbolo tiene sexo?, ¿no hay mujeres con pantalones y el pelo rapado?, ¿y hombres con faldas y coleta?.
Pero lo que realmente es peor es que se siga asociando a la mujer con falda y coleta… los símbolos son símbolos y por eso resumen pero también pueden encasillar, en este caso a las mujeres… si el razonamiento es que tradicionalmente las mujeres llevaban falda y el pelo largo… hemos de decir que tradicionalmente también se dedicaban en exclusiva a cuidar de su casa y creo que a nadie le habría hecho gracia que el muñeco (la muñeca) llevase un cesto de la compra.
Cuanto más detallen los símbolos menos gente se sentirá indentificada con ellos, ¿acabaremos poniendo fotografías de las personas que pueden cruzar por cada paso de cebra para que nadie se sienta discriminado?.
Desde luego, como acción de marketing, habría que ver cuál es realmente el objetivo de esta campaña (concienciar a la sociedad, generar buzz, generar debate social, ganar votos…) y entonces sabríamos si ha sido acertada o no. De todas formas, creo que esto podrá ser un paso más pero yo lo veo como puro marketing. ¿Vosotros que pensáis?
La reflexión la envía Marcos Pérez