Este verano que transita entre un menor ritmo de posteo y la necesidad de tratar temas menos sesudos y más distendidos, no está siendo tan así como debería. El otro día, trataba el tema de una campaña de emitida en Portugal que pretendía llamar la atención sobre la crueldad de la fiesta de los toros (más bien la fiesta que se corren las personas a costa del sufrimiento de los toros). Hoy, unos días después y en pleno fervor etílico-taurino en mi ciudad, Pontevedra, os traigo esa campaña realizada por la Sociedad protectora de animales francesa SPA en colaboración con otras dos organizaciones antitaurinas, que fué prohibida y censurada por la BVP, Oficina francesa de verificación de la publicidad. esta Oficina no autorizó la emisión del video porque podía dañar la sensibilidad de los más jóvenes.
Yo me pregunto y os pregunto a vosotros, ¿son tan fuertes esas imágenes?. ¿son reales o se las han inventado?. Yo no entiendo como se puede prohibir una campaña publicitaria que no hace más que mostrar imágenes reales. Estaremos de acuerdo en que el spot está claramente orientado a concienciar al target de la brutalidad de las corridas de toros. Los planos cortos y muy rápidos con imágenes cuidadosamente seleccionadas incitan al impacto, pero son reales, eso existe en las plazas y forma parte del espectáculo. Desde el gallinero y en las gradas mas altas, no se aprecia claramente pero desde abajo la sangre fluye a borbotones resbalando por el toro hacia la arena. Esto es así y eso muestra el spot.
Una decisión a mi entender incomprensible aunque como en todo habrá sus defensores. Creo que estamos jugando con fuego y esto de censurar un spot, secuestrar una revista y acciones similares se van a volver en nuestra contra.
por experiencia propia, a mí me abrieron los ojos una serie de documentales de Brigitte Bardot donde mostraban y explicaban todo tipo de crueldades hacia los animales en la industria moderna, desde la alimentación (hacían no sé qué en latas procesando pollitos VIVOS que tiraban en un gran embudo) hasta la vivisección (a los 9 años vi cómo le ponían un electrodo en la boca y otro en el ano a un zorro y lo electrocutaban). esto no ha hecho más que aumentar mi rabia por las bestialidades que se cometen, y mi compromiso con los animales. me ha abierto los ojos a la indefensión de las personas (también veía documentales sobre pobreza, incluso vi uno sobre los abortos) y la crueldad hacia todo tipo de seres vivos, y creo que si me hubiesen tapado los ojos, como a los caballos, lo hubiese asumido como «parte del sistema» al verlo ya crecida, ya que uno con la edad es más insensible si no ha sido educado con sensibilidad (y para sentir, hay que provocar, pinchar, acariciar…).
el intentar imponer «la vie en rose» no es más que una horterada superficial e irreal…
Cuando es dificil defender ciertas prácticas con argumentos de peso, se recurre a la censura. es triste que algo que existe, y se exhibe como la ‘fiesta’ de los toros, se prohiba en imágenes de plano corto y flash imapctante porque puede dañar la sensibilidad. No hay argumentos para defender esto. O si…