Grupo Pascual con su división de zumos y J. García Carrión con su marca de zumos Don Simón, continúan su particular lucha por la publicidad.
Uno se compara con el otro, el otro con el uno y así, entre tribunales, denuncias y comparativas engañosas, pretenden robarse unos cientos de consumidores que asisten atónitos a esta lucha libre particular entre dos grandes del Gran Consumo.
No sé, yo les recomiendo desviarse de esa senda de comparaciones y centrarse en las virtudes, características diferenciadoras y bondades de cada uno de los productos sin desvirtuar al otro y lanzando campañas en tono positivo.
Quizás esta estrategia que siguen busca estar en boca de tod@s (que hablen de ti aunque sea mal) pero yo abogo más por hacer que hablen pero bien.
vía | MarketingNews
Y digo yo: la publicidad comparativa no sirve si no se emplea con demasiada cortesía. Pero esta vez sí parece que le han pillado a Pascual diciendo menos cosas de las que debería sobre su producto.
Con todo en España se practica poca publicidad de este tipo, como de costumbre el mercado anglosajón lleva la delantera.
Cierto es que en España no se estila demasiado este tipo de publicidad, y aunque esto puede ser porque las empresas no contemplan esta posibilidad como habitual, pienso que el mercado y a los consumidores no acaba de gustarle este tipo de publicidad. Imagino que será la falta de costumbre aunque al final acabará entrando porque como bien dices alguien nos lleva la delantera y nosotros iremos detrás.